EL PRESIDENTE DE LA FEMPCLM REIVINDICA INCENTIVOS FISCALES PARA LAS ZONAS RURALES EN SU CAMINO A LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA DE 2030.

Gregorio: “Con estos incentivos y con la mejora de las comunicaciones, se lograría la atracción de empresas, frenar la despoblación y revitalizar las zonas rurales”.

El presidente de la Federación de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha (FEMPCLM), José Julián Gregorio, ha reivindicado a los gobiernos nacional y autonómico “incentivos fiscales y mejoras de las comunicaciones en las zonas rurales, para ampliar el impacto social y económico de la transición energética para 2030 en los territorios rurales”.

Así se ha pronunciado en la mesa “El papel de los territorios en la transición energética”, dentro de la Jornada “La transición energética: Oportunidad para el medio rural”, que han organizado CEPSA y el diario digital “El Español-El Digital de Castilla-La Mancha”.

Gregorio, ha compartido mesa con Santiago Lázaro, alcalde de Campo de Criptana; Gerónimo de Angulo, director de Desarrollo Renovable de CEPSA; y Soledad de Frutos, portavoz y diputada de Presupuesto, Hacienda y Promoción Económica de la Diputación provincial de Toledo; una mesa que ha sido moderada por Esther Esteban, presidenta ejecutiva de “El Español-El Digital de Castilla-La Mancha”.

En su intervención, el presidente de la FEMPCLM, ha explicado que “con estos incentivos y con la mejora de las comunicaciones, se lograría la atracción de empresas, frenar la despoblación y revitalizar las zonas rurales”.

Además, Gregorio ha señalado que “la transición energética es esencial para que los municipios sean más eficientes en sus instalaciones y en sus servicios al ciudadano y esto redunde en un ahorro de recursos públicos”.

Por último, ha destacado que hay proyectos que tienen un impacto de mayor o menor medida en función de la tecnología, pero que “hay que intentar ser eficientes y que los proyectos sean capaces de convivir con la sociedad” de forma que podamos avanzar todos juntos y ha señalado además que, es conveniente que “las ubicaciones donde se instalen, tengan usos compartidos con la ganadería y la agricultura”, porque eso redundará, sin duda, en beneficio de la población que habita y trabaja en las zonas rurales.